Pinchitos caseros

¡Lo conseguí! sí, conseguí comprar por fin las especias Ras el Hanout........ yupiiiiiiiiiiii!! en Carrefour, un bote enooooooorme (comparado con los botecitos de especias a los que estoy acostumbrada), y que me va a durar nosecuantísimo tiempo... al no ser que repita esta receta muy a menudo, jejeje...

Lo malo es que el Carrefour no me queda muy a mano, tengo que coger el coche y dar un "paseíto", y jopé, ahora la gasolina no está como para desperdiciarla... así que intento coger mi coche para ir a trabajar y, si puedo, para nada más...

Alberto y yo nos hemos acostumbrado a ir a comprar poco a poco (no como antes que hacíamos una compra grande que necesitábamos ir en coche), así que vamos un par de días a la semana a nuestros puntos habituales (Mercadona, Sorli Discau, frutería, bonArea, etc.) andandito, con nuestro carro de la compra de 9 euros de color... ROSA!!! y unas letras que ponen "aquest carro és verd" (=este carro es verde)......... pos no sé yo, eh? que yo lo veo rosa!!!! jajajajaja... el caso es que es un carro ecológico, comprado en el súper para así consumir menos bolsas de plástico.

Pues oye! bien pancho que lo lleva Alberto por la calle, y eso que yo imaginaba que me diría que él un carro de color rosa chillón no lo iba a llevar... jejeje...
Y ya para cuando nos toque la lotería, compraremos un súper-carro de ésos que cuestan 100 euros pero que hasta te guardan la compra en la nevera ellos solitos... jajajaja...

Además, intento tener el congelador con reservas de carne de caballo. Alguna vez ya lo he comentado: en mi casa más que ternera se come caballo/potro.

Llevaba tiempo que no tenía carne de caballo en casa, y le pedí a mi padre que me comprara, ya que la carnicería de confianza que "me ha alimentado" toda la vida está al lado de su casa. Qué entrecots, qué hamburguesas, qué de todo!!! es una carne roja pero de las más magras, y con una cantidad de hierro muy superior al resto de carnes. Y de sabor, algo más dulce, por el hierro, pero debéis probarla para saberlo.

Y a estas alturas no nos vamos a extrañar, que hemos visto crestas de gallo, carne de animales de caza que ni existen en España, palomas... para mí el caballo es la carne roja más consumida en mi casa, me ha acompañado toda la vida, y a Alberto también (su madre trabajó en una carnicería caballar), así que los dos la disfrutamos como realmente se merece, porque es fantástica!!

Así pues, mi padre me trajo el encargo de carne: picada (sin féculas!!!!), bistecs, entrecots, huesos para caldo... y carne para estofado. Ese día me dedico a hacer paquetes de ración de todo, y a congelarlo todo ordenadito y etiquetado. La carne de estofado la hice trocitos más pequeños, de bocado, porque no me gusta tener que echar mano al cuchillo para comer estofado... y cuando la iba a congelar, noté un ruido de "cascabelillos"... y ahí estaba, el bote de Ras el Hanout haciendo un sensual baile del vientre que decía: "úsame, ússsssaaaameeeeeee"... y la carne cambió su destino... ni pasó por el congelador, ni la usé para estofado... con ella hice unos PINCHITOS!!!!

INGREDIENTES
-300 gr. de carne de potro a tacos
-1 cucharada de postre de especias Ras el Hanout
-1/2 cucharada de postre de pimentón dulce
-Vino blanco
-Aceite de oliva virgen
-Orégano
-Sal

... el tema cantidades es muy relativo, creo que hay que encontrar el punto que le guste a cada uno. Yo ni siquiera conté cantidades, sólo de Ras el Hanout, que sé que si te pasas... pica!

PREPARACIÓN
-Cortar la carne a tacos del tamaño que queramos (a mí me gusta que sean más bien pequeños que no grandes)
-Colocar la carne en un bol que luego podamos tapar
-Echar la cucharadita de Ras el Hanout, el pimentón dulce, una pizca de sal, orégano al gusto, un chorro de vino (lo que veamos que puede "absorber" la carne pero sin que vaya a quedar demasiado líquido) y un chorrito de aceite.
-Remover bien, tapar y dejar en la nevera a macerar, mínimo 24 horas.

-En una sartén bien caliente, echar la carne adobada (yo no le puse aceite, porque aproveché los líquidos del adobo).
-Cocinar primero a fuego suave para que se hagan por dentro, y si se quiere se puede tapar
-Subir el fuego para que queden en su punto por fuera.

Aquí los vemos en la sartén:



Y aquí un detalle de cómo quedaron:



Se pueden acompañar de unas patatas, yo en este caso hice rodajas gorditas de patata, les eché un poco de sal y aceite, y las cociné 10 minutos en el micro, en un recipiente de pyrex, con tapa también de cristal:



NOTAS
-Aunque fue a ojo, el adobo quedó en su punto justo... para repetir, SIN DUDA!!!
-Quizá no quedaron tan tiernos como querría... pero eso debe ser por el corte de la carne del que era... ¿alguien sabe si el corte ideal para hacer brochetas o pinchos es el mismo que para hacer estofado?