Espinacas al ajo con pan (de mi suegra)

¡Hola! reaparezco después de casi un mes en silencio. He estado malilla, y la Semana Santa la aproveché para ponerme buena del todo y descansar todo lo posible. De cocina, poca cosa, aunque sí hay novedades a la vista: reseñas de nuevos productos que he probado (de comida y del hogar) y alguna sorpresilla para vosotros que os desvelaré en breve.
A partir de ahora sí que sí (y como casi cada año), la comida será más ligera, que hay que perder peso... aunque en el blog habrá recetas de todo, que los que tienen la suerte de no tener problemas de peso se sienten discriminados...... juaaaaaaaaaaaa, jua, jua....

Hoy empezamos con unas espinacas, receta de mi suegra, ya que hemos pasado unos días con los suegros en el Pirineo, y siempre aprendo algo nuevo de ella.

INGREDIENTES
-Espinacas (si son de huerto, mejor... aunque haya que limpiarlas mucho el sabor vale la pena... Éstas son del huerto de mi cuñada)
-Ajos (al gusto)
-Aceite de oliva virgen (yo sustituí ajos y aceite por ajopere, que ya lo tenía preparado)
-Pan duro (yo usé biscotes, porque en mi casa no hay pan duro nunca...)
-Un chorro de vinagre
-Sal

PREPARACIÓN
-Limpiar bien las espinacas. Ponerlas a cocinar al vapor (en una olla o sartén grande, sin agua, sólo con un chorrito de aceite y removiéndolas hasta que estén cocinadas).
-Ponerlas a escurrir (aunque no se hayan cocido sumergidas en agua, sueltan líquido). Si queremos, también podemos aplastarlas con las manos bien limpias, para que queden bien sequitas. Picarlas bien picaditas.
-Rectificar de sal.
-En una sartén, echar un buen chorro de aceite de oliva y los dientes de ajos picaditos (también se puede sustituir por ajopere).
-Echar las espinacas picadas, y remover para que se impregnen bien del aceite y del sabor de los ajitos.
-Mientras las tenemos al fuego, en el mortero, echar el pan duro con un chorro de vinagre, y chafarlo bien.
-Añadir este pan a las espinacas. Remover hasta que quede todo bien mezclado.
-Comer bien calientes. Se pueden adornar con un poco de crema de módena, si se quiere.

NOTAS
-El ajo es antiinflamatorio. Es muy bueno su consumo. Si no queremos que nos repita, quitaremos el tallo central de éstos y lo deshecharemos.
-El ligero toque del vinagre resulta fantástico con las espinacas.
-Primer plato completo, sólo nos faltará algo de proteína de segundo y ya habremos comido de todos los grupos de alimentos.
-Recordemos que el pan (aunque en poca cantidad) va incluído en este plato.
-Las espinacas están cargadas de ácido fólico y otros muchos nutrientes ideales para nuestra dieta. Es muy importante consumir verduras de hoja todas las semanas, tanto crudas como cocinadas.
-Para limpiar las espinacas debemos repasar bajo el grifo y entre nuestras manos hoja por hoja, para eliminar caracolitos, gusanitos y cualquier otro visitante que pueda haber, además de gran cantidad de tierra. Eliminaremos también los trozos feos y los troncos que vayamos a desechar. Después las pondremos en remojo dentro de un colador (recomiendo encarecidamente usar un centrifugador de verduras), con un chorrito de vinagre, durante 15 minutos. Escurrir, aclarar bajo el grifo repetidamente, removiendo bien las hojas. Centrifugarlas para que queden lo más secas posible. Esto es también el secreto de una buena ensalada: que las lechugas estén lo más secas posibles.