Tortellini con crema de Idiazábal y semillas

Acabamos de gastar el último "box" que nos regalaron para la boda. Este último era una cena "chic" para dos. De entre las opciones, decidimos ir a uno que, mirando en su web la carta, decidimos que podía ser buena opción.

Llegamos "los primeros", según nos dijo el camarero, y al cabo de un rato aparecieron otras dos parejas, también con el mismo box que nosotros. Luego llegaron 4 personas a cenar "normal", pero el porcentaje estaba claro, al menos el viernes había un 60% de clientes que venían con box y un 40% que venían "pagando".

La cena consistía, tal cual nos dijeron, en "3 entrantes a compartir, segundo de carne y pescado, y postre (más agua o vino). Peeeeeeeeeero no podíamos elegir el menú, y tampoco nos lo decían hasta apenas el momento en que nos lo servían. Yo estaba de espaldas a las otras mesas, pero Alberto se reía de las caras de "póker" que ponían las otras parejas. El ambiente, en general, era extraño, porque no sabíamos lo que íbamos a comer...
El primer entrante, 4 bocaditos de brie rebozado con mermelada de frutos rojos. Nos gustaron mucho, y eso que Alberto con el queso no se lleva demasiado bien... Eso sí, otra de las parejas le dijo al camarero que si había otro plato con queso, que lo cambiaran, porque a ella no le gustaba nada de nada el queso. Le oímos decir que sí, que había otro plato con queso y que se lo cambiaban, y nosotros ya teníamos una ligera "pista" de que algo más de queso habría en la cena...
El segundo entrante, un timbal de brotes de ensaladas con pulpo y pimientos. El pulpo completamente frío, si hubiera estado tibio seguro que hubiera estado mucho mejor...
El tercer entrante, tortellini de mousse de trufas con crema de queso idiazábal. Muy ricos. Sabían a queso, pero muy suave, a Alberto también le gustaron. La cantidad.... poquita cosa, la verdad...
Luego, los segundos. Tataki de atún con verduras al wok. Preguntaron cómo lo queríamos, y yo lo pedí hecho, el de Alberto casi parecía sushi, aunque estaba bien rico. Los trocitos de pescado más o menos como un dedo índice cada uno...
El segundo segundo, valga la redundancia, jeje... Solomillo de ternera con compota de manzana. También lo pedí hecho, Alberto al punto. Estaba rico, pero no excesivamente tierno, la verdad.
El postre sí que nos "defraudó", porque esperábamos algo más "intenso", quizá con chocolate... fue un trocito de tarta tatín con una bolita de helado de coco. Habiendo ya compota de manzana, creo que debería haber sido otro postre, para no repetir la misma fruta...

La velada muy bien, intentamos mirar qué comían (y las cantidades) los que iban "pagando", pero no llegamos a verlo, la verdad.
La comida también, muy bien, aunque nosotros somos más de ir a comer a los sitios y salir "llenos", y sobre todo poder elegir (o al menos saber de antemano) lo que vamos a comer... jajajaja...

¿Vosotros habéis tenido alguna cena sorpresa de este estilo?

El caso es que desde la cena tenía claro que iba a hacer 2 cositas de las que comimos: la crema de idiazábal para pasta (ya sabía perfectamente cómo) y la compota de manzana para acompañar carne. La verdad es que con la crema he quedado maravillada:

INGREDIENTES
-1 paquete de tortellini (los míos de espinacas y ricotta)
-400 ml. de nata o leche evaporada (yo usé leche evaporada)
-2 cucharadas soperas bien llenas de mousse de queso de oveja Idiazábal, de Conservas Rosara
-Semillas variadas (yo Bio mix 6 semillas Int-salim)
-1 pizca de sal
-1 pizca de nuez moscada

PREPARACIÓN
-Hervir la pasta, siguiendo las instrucciones del paquete que vayamos a cocinar, y teniendo en cuenta que siempre deberá estar hecha la salsa antes que la pasta, para que ésta no se pase.
-Llevar un cazo al fuego medio con la nata y el queso. Remover continuamente, hasta que el queso se disuelva totalmente en la nata. Rectificar de sal al gusto, echar una pizca de nuez moscada y una cucharadita de semillas. Seguir manteniendo al fuego. La salsa debe llegar a hervir un momento. Apagar.
-Escurrir la pasta, y emplatar: primero unas cucharadas de salsa, luego la pasta y luego más salsa encima y unas semillitas para decorar encima del todo.

NOTAS
-Para repetir, sin duda alguna. Un sabor estupeeeeeeeeeeendo.
-Salsa facilísima de hacer, también combina con carnes rojas.
-Las semillas le dan un toque especial, aunque se pueden obviar si no nos apetecen.
-La pasta nunca debe esperar a la salsa, sino al revés, para que la pasta no se pase.
-La salsa la dejaremos hervir para que espese, si no, quedaría más líquida.
-Con espaguetti debe estar casi más rica, ¡si cabe!
-Si no se tiene la mousse de Idiazábal de Conservas Rosara (aunque la recomiendo), se puede hacer la salsa con un trozo del mismo queso, rallado, aunque quizá debamos pasar la batidora o esperar mucho más para que el queso se disuelva....

¡Ah! y gracias a Maika y Carlos por su fantástico box de regalo... cuando vengáis a casa, si queréis, os hago la pasta con esta salsa, en vuestro honor!!! :-)

Este post ha sido redactado según el Código de Confianza C4C (Int-Salim y Conservas Artesanas Rosara me han proporcionado gratuitamente las muestras citadas para probarlas y reseñarlas).