Nosotros estuvimos la otra semana de spa, y teníamos incluído un masaje con envoltura de chocolate y luego masaje de espalda relajante. La verdad es que no sabíamos exactamente qué tipo de masaje nos iban a hacer hasta el momento de hacérnoslo, pues íbamos con un box de regalo que nos regaló una tía mía (DEP, tía Paca) para nuestra boda, y que ya era hora de gastar. Además, evité preguntar con antelación sobre ello, pues a Alberto nunca le habían hecho un masaje y no estaba muy seguro de que aquello le fuera a gustar. Vamos... que le hice la encerrona de llevarle al "matadero" sin que él supiera qué le iban a hacer... jijijiji.
Primero me lo hice yo, y Alberto esperó en la habitación del hotel para venir luego.
Llegué a la cabina de masajes, y la chica me informó que primero me haría una cobertura de chocolate y después de un rato me lo aclararía en la ducha para acabar con un masaje relajante de espalda.
Comenzó la chica a embadurnarme de chocolate y aquello que hacía un olor fantástico....... ummmmmmm!!! tentada estuve de preguntarle si lo podía probar... jejeje. Cerré los ojos y me imaginaba a mí misma como una tarta sacher, y casi hasta con cerezas en almíbar, una en cada lado del culete....... jajaja... Luego me envolvió con plásticos y toallas, como un crepe relleno de chocolate, y a sudar. Luego me puso un batín de papel y salí a la sala contigua para aclararme en la ducha y que me hiciera el masaje relajante que me encantó. No he visto diferencia en mi piel, pero el buen rato me lo llevé, la verdad.
Llegó el turno de Alberto. Mientras él entraba en la cabina de masaje, y me preguntaba precipitadamente "qué te han hecho?? ha estado bien?" -con ojos de niño que entra en la consulta del dentista-, yo me reía y calculaba cuándo saldría mi hombretón cubierto de chocolate y en batín de papel para ir a la ducha. Qué mono que lo vi!!! jajaja.
Sí, le ha gustado, y dentro de un par de semanas repetiremos con otro box de regalo de la boda, que los tenemos acumulaos!!! jajajajaja...
Aix, CHOCOLATE!! qué recuerdos!!! parece que haya pasado una eternidad desde la última vez que lo comí, y eso que sólo llevo una semana cuidando mi alimentación y evitando las guarrerías hipercalóricas... ¿vosotros también estáis a dieta? yo confieso que todavía no me he pesado, porque me da miedo y prefiero haber perdido algo y pesarme en unas semanas, sin saber el peso inicial con el que empecé, la verdad....
Mi tupper para hoy es sano, aunque no hipocalórico, aunque bueno, es apto para una dieta equilibrada, siempre y cuando no nos pasemos con el aceite y no nos comamos una cantidad industrial...
El resultado:
INGREDIENTES
-Guisantes congelados
-Jamón (yo los restos de apurar la paletilla que nos trajo Papá Noel, que ya nos la hemos acabado)
-1 trocito de pata de cerdo cocida (yo del caldo)
-Cebolla picada
-Salsa de tomate frito casero
PREPARACIÓN
-Cocer guisantes en agua con una pizca de sal (no mucha, pues el jamón que los acompañará es salado)
-Aparte, picar la cebolla muy pequeñita, y saltearla en una sartén con una cucharada de aceite, junto al jamón y la pata de cerdo cocida, también picado (NO SALAR).
-Escurrir los guisantes. Mezclar el sofrito de cebolla+jamón+pata con los guisantes, echar unas cucharadas de salsa de tomate frito (al gusto), y remover los ingredientes al fuego hasta que esté bien integrado.
-Servir
... o guardar en el tupper para llevarlo al trabajo:
NOTAS
-Sigue manteniéndose muy bien después de calentarlo en el micro, así que es ideal para el tupper.
-Cuidado con la sal: el jamón al saltearse queda más salado, así que no hace falta echar sal, más que una pizca en el agua de cocer los guisantes.
-Se puede eliminar la pata si no nos gusta o no tenemos, con jamón sólo también está bien rica.
-También se puede saltear la cebolla y el jamón con ajopere.
